El Make Up, de: El Botero, es uno de los grandes logros en términos de propuestas. Tres concepciones de Néstor, elaboradas como propuestas a la dirección de arte. Que tienen que ver con tres etapas en la vida del personaje. Antes del conflicto, durante y al final después de la tragedia. El ritual del maquillaje, es un proceso de búsqueda y encuentro. Largas horas de ensayo y pruebas de distinta índole, fueron necesarias para afinar cada detalle del, maquillaje desde la mirada analíticamente perfeccionista de Erika Pulgar, como directora de arte.
El profesional trabajo realizado, bajo la ejecución y supervisión de Danny, por las otras dos maquilladoras, da cuenta de la materialización de diferentes miradas y concepciones, respecto a la materialización de Néstor. Esta materialización tiene una piel, manos, uñas, ojos, rostro, un cuerpo en definitiva, al cual el maquillaje viene a contribuir, en la manifestación mágica, de Néstor. Maquillar a Néstor, es develarlo, descubrirlo, trazo a trazo, pincelada a pincelada, sombra tras sombra. Implica la disposición a que Néstor, aparezca. Así como el escultor, retira de la piedra aquello que sobra, para que la escultura emerja. El maquillaje retira las formas del ejecutante, para que el personaje aparezca.
Desde la actuación, el proceso interior es similar. Cada instante de sopor, en el que comienza a caer el actor, mientras es maquillado, es un paso consciente, hacia la plena apertura, a la transformación psicofísica, en otro ser, que comienza a aparecer lentamente, hasta que se manifiesta, en sus distintos tonos emocionales. Una sensación de sueño, comienza a invadir al actor, mientras deja de ser él, para transformarse en el personaje. En ese ensueño, estado casi hipnótico, donde el personaje adquiere vida propia.
Cada detalle de Néstor fue cuidadosamente, concebido, realizado y seguido, a cada instante.
Los retoques, los cambios de acuerdo a las atmósferas que se deseaban crear, fueron previstos y realizados muy profesionalmente, por todo el equipo. Incluso aquí hay un dato interesante. Un detalle, a 20 metros del lente gran angular, en un plano general, podría no verse. Pero no es así. Aunque lejos estuviese Néstor sobre un bote, cada detalle correspondía a su existencia y eso permitió que se manifestara, en plenitud.
©2009 Carvajal Art
Fotografías: Erika Pulgar- Daniel S.
